La Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) se suma a esta conmemoración, una fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1994.

El objetivo llega a reconocer la riqueza cultural, histórica y espiritual de los pueblos originarios del mundo, así como para visibilizar los desafíos que enfrentan.

La celebración tiene sus raíces en 1982, cuando se realizó la primera reunión del Grupo de Trabajo sobre «Poblaciones Indígenas de la Subcomisión de Prevención de Discriminaciones y Protección a las Minorías» de la ONU. Desde entonces, la fecha se ha transformado en un espacio de reflexión y compromiso global.

En la actualidad, los pueblos indígenas desempeñan un papel crucial en la conservación de la biodiversidad, la transmisión de conocimientos ancestrales y la defensa de lenguas y culturas en riesgo de desaparecer. Sin embargo, continúan enfrentando múltiples formas de discriminación, despojo territorial y amenazas a sus derechos fundamentales.

Organismos internacionales, gobiernos, comunidades y organizaciones sociales aprovechan esta fecha para impulsar acciones concretas en favor de la inclusión, el reconocimiento de sus territorios y la preservación de su legado.