Educación técnica y tecnológica de nivel medio y terciario, y formación profesional básica y superior en todo el territorio del Uruguay, sobre la base de los principios de gratuidad, laicidad e igualdad.

A sala llena: «Proyección 2025», una noche de cine que celebró a una nueva generación de técnicos en Audiovisual

En un ambiente de celebración, la comunidad educativa del Polo Educativo Tecnológico LATU se reunió en el Salón de Actos de UTU Central para disfrutar de la proyección de los cortometrajes de egreso de los turnos matutino y nocturno de la Tecnicatura en Audiovisual. El evento, denominado «Proyección 2025», reunió a familias, docentes y referentes en una instancia que celebró el trabajo de dos años de formación.


18 de diciembre de 2025

La función comenzó a las 19 horas, cuando los grupos TC4 y TD4, y el primer año de la tecnicatura, presentaron al público una serie de cortometrajes con diversas temáticas. Entre ellos, el grupo de primer año, bajo el nombre Los Oníricos, abrió la muestra con obras que exploraron distintas experiencias y miedos vinculados al crecimiento, el misterio de la vida y el proceso de graduación. Cada obra dejó entrever interpretaciones particulares de estas temáticas, jugando con diferentes perspectivas, escenografías, sonidos, música y elementos simbólicos.


Por su parte, los grupos TC4 y TD4 exhibieron los cortos Rojo, un film emocional que retrata aquellos momentos breves pero de gran impacto en la vida, explorando a dos personajes que se conocen en su juventud y cuya historia perdura para siempre en el recuerdo del otro; Lo que queda de nuestra memoria, una historia personal de la directora junto a su abuela, donde el suspenso recorre la delgada línea entre lo sobrenatural y la realidad; y, finalmente, La muerte de Giuseppe, un drama que plantea una incógnita a la interna de una familia de gánsteres en torno a la muerte de uno de sus miembros más importantes.


Esta instancia anual representa la culminación del proyecto final de carrera, una formación en la que se trabaja en equipo, replicando la dinámica de una producción audiovisual profesional. El proceso abarca todas las etapas: desde la preproducción y el guion hasta el rodaje, la edición y la postproducción. Si bien la mayoría de los cortometrajes son de ficción, también se presentan documentales, falsos documentales y videoclips, entre otros formatos.


«Este es el lugar donde todo lo que se viene aprendiendo debe verse reflejado en un proyecto. No es una prueba para demostrar que se sabe cómo funciona cada cosa, sino que implica un trabajo emocional, donde pueden surgir conflictos o donde todo puede fluir bien, pero que forma una parte esencial del desarrollo de un profesional del cine», explicó el coordinador de la Tecnicatura en Audiovisuales, Andrés Costa. Asimismo, destacó que uno de los aspectos más valiosos de la jornada es poder observar el fruto de todo el proceso y compartirlo colectivamente con compañeros, amigos, familias y parejas. «Lo más importante es que tengan ese último recuerdo lindo en colectivo», señaló.


En cuanto a los desafíos, Costa sostuvo que una de las características más importantes es mantener un trabajo continuo y autónomo por parte del estudiante, ya que las clases presentan una dinámica diferente a la pasividad habitual de asistir y escuchar. A esto se suma la necesidad de vincularse con los compañeros dentro de un proyecto que se desarrolla en períodos acotados en cada fase de la producción audiovisual.


Por último, subrayó: «Desde que doy clases, lo que más me gusta y me hace olvidar lo difícil que es ser profesor, es cuando estoy trabajando en el ámbito profesional y veo a un egresado. Verlos trabajando al poco tiempo de egresar me deja muy contento».